Martes 21 de Febrero de 2006

Han pasado dos semanas. Me fui a Puerto Viejo en el lado caribeño a pasar unos dias a la playa y despuès a San José. La verdad es que ya tenia ganas de regresar a Bajo Calvo. Aqui se esta de maravilla, cada dia el cielo esta azul, la temperatura buenissima y el aire muy puro.
Visito la finca con Flor y Gabriel su marido. Ella es hermana de Felicia nuestra casera. Son muy buena gente , siempre dispuestos a hacerte un favor. En realidad casi todas las personas que estan a nuestro alrededor se ofrecen para ayurdarme o tambien ofrecer sus servicios. Decidimos cortar unos arboles de cedro,roble y laurel para aprovechar la madera en vista a construir unas cabinas y tambien utilizar la madera de cedro para forrar los techos del cielo raso. Aqui se estila este artesanado y el resultado es realmente bonito dandole un toque rustico.
Encargo el trabajo a Omar, el primo de Francisco. Vive justo a la entrada de la finca lo cual facilita la relación y la comunicación. Para el, es una suerte tener este trabajo que puede combinar con otras ocupaciones y le aporta un dinero inesperado.